lunes, 21 de diciembre de 2009

Desvelan el mecanismo molecular de la metamorfosis de los insectos.

Investigadores de la Universidad de Minnesota en Estados Unidos han descubierto cómo la hormona protoracicotrópica (PTTH), una hormona producida por el cerebro, controla la metamorfosis de los insectos jóvenes en adultos. El estudio, que se publica en la revista 'Science', podría ayudar en el desarrollo de pesticidas más eficaces y seguros para el medio ambiente para controlar las plagas agrícolas y los insectos que portan patógenos humanos.

Los científicos saben desde hace un siglo que un neuropéptido derivado del cerebro conocido como PTTH controla la metamorfosis y aunque su secuencia específica se identificó hace 20 años, la forma en la que envía las señales al tejido endocrino ha seguido siendo un misterio hasta ahora.

Aunque los humanos no pasan por una metamorfosis, el paso de la infancia a través de la pubertad y el desarrollo de las características sexuales adultas también está regulado por un neuropéptido derivado del cerebro controlado por los genes, el ambiente y la nutrición. El conocimiento de cómo este proceso funciona en los insectos arroja luz sobre el desarrollo humano.

Según explica Michael O'Connor, responsable del estudio, "en su diseño global, la metamorfosis de los insectos es muy parecida al paso por la pubertad. Desde un punto de vista biológico, tanto la pubertad como la metamorfosis cumplen el mismo objetivo: proporcionar capacidad reproductiva para las especies en el momento adecuado del desarrollo". La hormona cerebral se vuelve activa cuando los insectos han alcanzado un umbral de peso corporal, que también es un desencadenante para la pubertad humana.

Los investigadores utilizaron para su estudio moscas de la fruta y polillas de seda, sin embargo, todos los insectos que pasan por una metamorfosis completa parecen utilizar este mecanismo de señalización, concluye O'Connor. Su siguiente paso es descubrir cómo los indicios ambientales y nutricionales regulan la producción de PTTH.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Las hormigas legionarias pueden ser compasivas.

Las colonias de hormigas legionarias, también conocidas como marabunta, habitualmente hostiles entre sí, muestran a veces comportamientos pacifistas y compasivos. Un nuevo trabajo realizado por un investigador del Harvard Museum de Comparative Zoology y colegas de la Universidad de Copenhague muestra que en algunos casos estas colonias puede cooperar en lugar de combatir.

En esos casos, cuando una colonia de hormigas legionarias pierde a su reina, sus obreras son absorbidas, no eliminadas, por las colonias vecinas, y en cuestión de días pasan a ser tratadas como si fueran miembros de la misma familia.

La investigación, conducida en en una zona rica en esta clase de hormigas en las estribaciones el Monte Kenia, se publica en la revista 'Proceedings of the Royal Society B'.

Las colonias de hormigas legionarias están gobernadas por una única gran reina que produce los huevos que dan lugar a todos los individuos de la colonia, y que puede producir millones de obreras. Cuando muere, las colonias desaparecen rápidamente, lo que suscita la cuestión de qué pasa con tantos individuos.

El trabajo fue conducido por Damiel Kronauer durante dos periodos de trabajo realizados en Kenia. Kronauer y su equipo siguieron la suerte de un total diez colonias de hormigas legionarias a las que se privó de reinas. Los investigadores perdieron el rastro de dos colonias pero observaron dos estrategias diferentes utilizadas por las ocho restantes.

La mayoría de las colonias sin reina, siete de las diez, simplemente se unieron a la colonia vecina --tal y como se determinó por análisis genético-- en la que las nuevas obreras perdían lentamente su olor distintivo y en días se convertían en miembros plenamente integrados.

En la décima colonia, las obreras optaron por la estrategia de producir una pequeña prole de hormigas macho aladas. Aunque éstas fueron retiradas para su análisis, en una colonia no alterada estos machos volarían en busca de jóvenes reinas sin pareja. Aunque esta estrategia proporciona una oportunidad para salvaguardar los genes de la colonia, la pequeña cantidad de machos producida concretamente 31 frente a los 3.000 de una colonia normal prueba que esta estrategia no puede resultar eficiente.

martes, 8 de diciembre de 2009

Cómo engañar a las abejas.

Las plantas contraatacan. Eso debió de pensar la despistada abeja que fue a matar a esta rara avis de China. Pero la noticia es que fueron cientos de abejas las que se fueron directas y sin hacer preguntas a por esta variante de Orquídea oriental. Este tipo de planta suelta una sustancia algo rara que enloquece a los abejones que se piensan que son atacados por la flor. La conducta extraño a los científicos que observaban las plantas al ver como las abejas se lanzaban con muy mala leche contra las pobres flores.

Tras numerosos estudios, los científicos se han quedado boquiabiertos. Esta forma de engaño natural ha descolocado a la comunidad de estudiosos que ni siquiera pudo con el antídoto de esta flor. De hecho, se probaron falsos aromas y este tipo de orquídea seguía sacando de quicio a los abejones. Lejos de las preguntas habituales, o de intentar averiguar porqué una flor se ha convertido en camicace, los analistas aprovechan para llevarse a su terreno el hallazgo obtenido.

En muchas ocasiones, este tipo de insectos puede acabar con la vida de plantaciones parecidas a estas, por lo que si hay un aroma que las atrae y las pone en guardia, lo mejor será aprovecharlo para crear antídotos contra la especie. Eso han debido pensar los analistas de laboratorio Si no puedes vencer a tu enemigo, clávale un machete de monte por la espalda y cuando nadie te vigila.

Los científicos chinos ya tienen en la cabeza un remedio para desarrollar trampas ambientales contra las plagas de abejones que les comen las cosechas y les revientan las frutas.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Los animales piensan

Es evidente que nuestro intelecto se encuentra muy por encima de las posibilidades de cualquier especie conocida, pero, a diferencia de lo que muchas personas creen, los animales comparten con nosotros numerosos rasgos psicológicos en lo que al pensamiento se refiere. Así, un experto en psicología experimental de la Universidad de Granada, Matej Hochel, asegura que “el entorno natural da lugar a muchas situaciones impredecibles que, para muchas especies, serían un gran obstáculo a la hora de intentar sobrevivir únicamente con nociones genéticas y nociones automatizadas”.

Además, constata que el conocimiento se propaga en grupo: “las ratas evitan los alimentos envenenados una vez que han visto que otra de su especie a muerto o ha sufrido malestar al ingerirlos. Así, las crías aprenden de sus padres a no ingerir dichos productos, aunque no hayan presenciado las consecuencias que ocasionan. Esta atención activa del animal y su aprendizaje corroboran su inteligencia”. Matej Hochel asegura que muchos expertos de laboratorio confirman que existen ciertas especies con muchas destrezas mentales, que anteriormente se creían únicas en el ser humano.

Investigar el pensamiento de un ave o un mamífero no es una tarea sencilla, puesto que se da una clara ausencia de lenguaje, por lo que la creatividad del investigador tiene un papel fundamental. “De esta forma”, explica este catedrático de la Universidad de Granada, “el experimentador pone al descubierto los problemas que permitan discernir el comportamiento automático de una actuación pensante. Esta labor es más sencilla cuando el animal se presenta ante alguna situación de peligro o de novedad, donde hay poca probabilidad de que dé con la respuesta correcta si sólo recurre a una conducta automatizada”.

lunes, 26 de octubre de 2009

Las Abejas también tienen su inteligencia.

INTELIGENCIA DE LAS ABEJAS

Investigaciones recientes han proporcionado información sobre algunas de las capacidades cognitivas de las abejas. Estos resultados son impresionantes teniendo en cuenta el diminuto cerebro de estos animales. Asimismo se han puesto de manifiesto algunas habilidades fascinantes que asemejan a estos insectos con los seres humanos.


Por ejemplo, las abejas reconocen las caras humanas y tienen la suficiente habilidad para discernir entre dos caras humanas distintas. Por otro lado, tal como hacen las personas tienen dificultades para reconocer rostros si están invertidos ciento ochenta grados.
Además, las abejas pueden contar hasta cuatro objetos cuando los encuentran sucesivamente en su ruta de pecoreo. Parece que las abejas pueden ayudarse en su navegación en busca de alimentos mediante el reconocimientos de los hitos importantes que encuentran en el camino, siempre que su número no sea mayor de cuatro.

Las Hormigas tienen su inteligencia.

Un grupo de investigadores comprobó que existe una capacidad de entendimiento entre estos insectos y afirmaron que pueden aprenden comportamientos a través de observar y copiar los actos de otros miembros del hormiguero.

Científicos de la Universidad de Bristol, Inglaterra, descubrieron que la especie de hormigas, Temnothorax albipennis, se transmite información sobre la mejor vía para obtener comida.

Al parecer, una hormiga se acerca a la otra y la primera le muestra a la segunda el camino que debe recorrer desde el hormiguero hasta la fuente de alimento. Ambas se hacen señales mutuas para controlar tanto la dirección como la velocidad de la marcha, explican los expertos en la revista Nature, según informa el diario Hoy.

Durante el trayecto, las hormigas se detienen varias veces para que la "alumna" se fije en detalles que después le permitirán recordar el trayecto.Cuando está lista para continuar el camino, la hormiga agita sus antenas, golpea sus patas traseras y el abdomen de la "profesora" y entonces, reanudan la marcha. Además, los científicos señalaron que la pareja de hormigas interactúa en forma constante, ya que si la distancia entre ellas es grande, la primera desacelera y la segunda se da prisa y viceversa.

La investigación revela que existe un proceso de enseñanaza y aprendizaje en estos insectos. Ya se había descubierto la capacidad raciocinio en otros animales, como los delfines y los primates.


miércoles, 7 de octubre de 2009

La vida en sociedad moldeó el cerebro y la conducta de insectos.

Los investigadores encabezados por Sean O'Donnell, profesor de psicología en la Universidad de Washington, encontraron que una región importante en el cerebro de una avispa primitivamente social se desarrolla mejor en las hembras dominantes que en las subordinadas.

Este hallazgo, el primero de su tipo, contrasta con la mayoría de trabajos anteriores sobre el desarrollo del cerebro de los insectos sociales. Esos estudios se hicieron sobre especies muy sociales con tamaños grandes de colonia. Entre estas especies, la edad desempeña un papel importante en la ejecución de tareas, y las obreras que dejan el nido para forrajear generalmente han desarrollado mejor sus cerebros.

Los investigadores encontraron un patrón opuesto en una avispa primitivamente social. Aquí, las hembras dominantes (que se quedan en casa) tenían un desarrollo mayor del cerebro. En esta especie, las interacciones de dominancia directa entre las hembras determinan la ejecución de tareas. Para explicar el desarrollo del cerebro, eran más importantes la dominancia y las interacciones sociales que las tareas de forrajeo.

En este nuevo estudio, O'Donnell y sus colegas de la Universidad de Texas analizaron el desarrollo del cerebro de la avispa primitivamente social Mischocyttarus mastigophorus del bosque tropical nuboso cerca de Monteverde, Costa Rica. Estas avispas viven en colonias cuya población varía desde varios individuos hasta varias docenas, y donde la división de labores es gobernada por la agresión.

Los investigadores examinaron ciertas áreas del cerebro de los insectos. Los datos mostraron que esas áreas eran más grandes entre las reinas y las hembras que permanecían dentro del avispero. Esto es lo opuesto a lo que varios investigadores han encontrado entre las especies muy sociales con grandes tamaños de colonia. En tales especies muy sociales, generalmente las obreras que dejan el nido para forrajear tienen cerebros mejor desarrollados.

Parece claro que las colonias primitivamente sociables eran la situación ancestral, y que las colonias muy sociales se desarrollaron y evolucionaron a partir de ellas.

Esta investigación sugiere que el comportamiento de ejecución de tareas y el desarrollo del cerebro han cambiado de una manera fundamental en los insectos sociales que forman colonias complejas y grandes, con respecto a los insectos primitivamente sociales.

Este trabajo cobra gran importancia porque los insectos sociales son un modelo muy útil para entender el diseño de los cerebros y la relación que existe entre el diseño cerebral y la complejidad social. Y tiene implicaciones para la sociedad humana porque la evolución de nuestra propia sociedad puede afectar al desarrollo del cerebro.

La conducta social impone fuertes demandas sobre el cerebro humano.Los coautores del estudio son Theresa Jones, profesora de psicología, y Nicole Donlan, técnica de investigación, ambas de la Universidad de Texas.

lunes, 17 de agosto de 2009

Conoce sobre La Hormiga Acróbata.


Introducción.
Entre las hormigas acróbatas se incluyen varias especies. Su nombre común es descriptivo del hábito que tiene esta hormiga de elevar su abdomen por encima del tórax y cabeza, sobre todo cuando se le molesta. En los Estados Unidos se encuentran varias especies, incluso en altitudes superiores a los 2500 m.

Reconocimiento.
Las obreras son mono mórficas, de aproximadamente 2.5 a 4 mm de largo; las reinas llegan hasta 10 mm de largo. Color de marrón claro a negro, a veces multicolor. Antena con 11 segmentos, con una clava de 3 segmentos. Tórax con un par de espinas dorsales. Pedicelo de 2 segmentos, adherido al lado superior del gáster. Gáster en forma de corazón si es visto en posición dorsal, la parte más ancha hacia el tórax y agudamente puenteado hacia la parte de atrás. Aguijón presente. Las obreras de muchas de las especies emiten un olor repulsivo en señal de alarma.

Grupos similares.
(1) Hormiga cortadora de hojas (Atta. spp.). Con 3 pares de espinas dorsales en el tórax, el pedicelo adherido al gáster en el centro desde la vista lateral, y el gáster no tiene forma de corazón visto dorsalmente. (2)Otras hormigas con pedicelo de 2 nódulos adherido a la mitad del gáster visto lateralmente y con gáster sin forma de corazón en su vista dorsal.

Daños y señales de infestación.
A menudo la única señal exterior de daño es la acumulación de desecho expulsado por estas hormigas, sobre todo cuando el desecho es de aislamiento de poliestireno. Aunque prefieren la madera ablandada por pudriciones de hongos o el aislamiento de poliestireno, pueden ampliar las cavidades que otros insectos han hecho en la madera. En ocasiones quitan el forro de aislamiento de los cables telefónicos o eléctricos, lo que puede provocar cortocircuito.

Biología.
No hay muchas publicaciones acerca de la biología y hábitos de la hormiga acróbata. La mayoría de las especies están descriptas como infestadoras de estructuras anidando en nidos de moderados a grandes. Probablemente la especie mas comúnmente encontrada es C. lineolata (Say) con obreras de 3 a 4 mm, machos de 3.5 a 4 mm y hembras de 7 a 8 mm de largo. Esta especie varía mucho en su coloración y anida en alturas de hasta 1.700 m las Montañas Blue Ridge. Muchas de las especies, incluyendo C. lineolata, cultiva áfidos y construye refugios de cartón para cubrirlos. C. lineolata fabrica protecciones similares que son usadas como cámaras de nacimiento/crianza. Se han observado enjambres (alados reproductores) en los nidos o emergiendo de ellos desde mediados de junio hasta finales de septiembre. El olor emitido por C. lineolata se asemeja al de las heces fecales de los mamíferos.

Hábitos.
Dentro de las estructuras la hormiga acróbata típicamente anida en madera que a estado expuesta a alta humedad y pudrición por hongos. También anidan en paneles de espuma de poliestireno y huecos de los muros. En el exterior muchas especies anidan bajo las piedras, en barrotes, leña o árboles en los que las pudriciones por hongos les permiten hacer túneles bajo la corteza y/o en la madera. Las obreras entran a través de las gritas y agujeros que hay alrededor de las líneas/tubos de los servicios públicos, marcos de las ventanas, etc. Las obreras también pueden formar caminos por el terreno, entrar por debajo de las puertas, agujeros y otras aberturas o grietas. La hormiga acróbata se alimenta de la miel de los áfidos y pulgones lanígeros, insectos a quienes cuidan como si fuera su propio ganado. También se alimentan de insectos vivos o muertos, incluyendo enjambradores (alados reproductores) de las termitas. En el interior muestran preferencia por los alimentos dulces y con alto contenido de proteína como las carnes. Cuando se molesta o se alarma a la colonia, las obreras de todas las especies, excepto las más pequeñas, tienden a ser bastante agresivas. Suelen estar listas para morder y emitir un olor repulsivo.

lunes, 10 de agosto de 2009

Las hormigas Zombies.


Si odian las hormigas, igual les gusta la terrible historia de las hormigas Zombies. Miguel Artime nos narra este descubrimiento que demuestra una vez más que la belleza y la armonía de la naturaleza son un invento de la idealización humana.
«Dale la vuelta a alguna hoja en un bosque de Tailandia y podrías descubrir la tumba de una hormiga zombi.

Las mentes de estos pobres insectos fueron conquistadas por un hongo parásito conocido por Ophiocordyceps unilateralis que obliga a las hormigas arborícolas (Camponotus leonardi) a descender cerca del suelo en busca de una hoja joven de la que poder alimentarse.

El hongo conduce a las hormigas hacia hojas que se encuentran a tan solo 25 centímetros del suelo, tal y como informan los investigadores en la edición online del 23 de julio de la revista The American Naturalist.»

Colmenas en los hogares de Gran Bretaña, para salvar las ABEJAS.


Deseosas de frenar la disminución de la población de abejas, las autoridades inglesas lanzaron este miércoles un programa para alentar a los ciudadanos de las ciudades a instalar colmenas en sus jardines o incluso en sus balcones.

Natural England, la agencia pública que asesora al gobierno en materia de medioambiente, presentó una nueva colmena de plástico destinada a facilitar su instalación en la ciudad.

El nuevo modelo, bautizado "beehaus", es más grande que una colmena normal, para que las abejas tengan más espacio, y permite recolectar 50 tarros de miel con sólo una hora de atención semanal en verano, subrayó la agencia.

La primera "beehaus", de colores gris y amarillo, orna ya el techo-terraza de las oficinas de Natural England, en pleno centro de Londres.

El jefe del equipo científico de la agencia, Tom Tew, explicó que si hubiera más abejas en las ciudades se incrementaría el número de insectos y los haría más resistentes a las enferemedades y plagas que amenazan su supervivencia.

"Tenemos que reconocer que si queremos que las plantas florezcan, necesitamos poblaciones sanas de insectos para preservarlas", declaró.

"No hay ninguna razón para que nuestras ciudades sean desiertos de fauna y flora. La fauna y la flora pueden prosperar si diseñemos nuestras áreas urbanas pensando en la naturaleza y la 'beehaus' es un buen ejemplo de cuán facil es para cualquiera traer la naturaleza hasta la puerta de su casa", agregó.

El número de abejas se redujo de entre el 10 y el 15% en los dos últimos años en Gran Bretaña, según cifras oficiales, pero este síndrome de despoblamiento de las abejas se registra en el mundo entero.

lunes, 3 de agosto de 2009

Un parásito causa que la hormiga huésped se torne de color rojo carmesí.



Las hormigas que portan parásitos nematodos actúan casi con normalidad, sin embargo, pareciera que pertenecen a otra especie.
El abdomen de la hormiga, o gaster, se vuelve rojo y la hormiga lo mantiene elvado, de tal forma que se asemeja a una baya madura.
Las hormigas adultas no se infectan directamente, sino que ingieren alimentos infectados con larvas, las cuales, al llegar a la etapa adulta, se aparean y ponen más huevos dentro del gaster.

Hablemos de las 'Hormigas'

Enterate de los grandes 'Secretos de las Hormigas'

lunes, 27 de julio de 2009

Hormigas Culonas, un manjar para unos y un alimento exótico para otros.

Las Hormigas culonas ahora se consiguen empacadas y con sabores a limón.

Esta idea fue de Fabián Ricardo Hernández, de 29 años, estudiante de mercadeo y publicidad, y de Freddy Toscano, veterinario, de 38.

Un manjar, para algunos, y un alimento exótico, para otros, se constituyen las famosas hormigas culonas de Santander que ahora, y aunque parezca una fábula, se consiguen en el mercado empacadas en cajas como las uvas pasas y con sabores a limón y BBQ (picante).
La creatividad de Fabián Ricardo Hernández, estudiante de mercadeo y publicidad de 29 años, y Freddy Toscano, veterinario de 38, 'volo' para llegar al producto en el que se empacan a las hormigas reinas que con su voluminoso abdomen salen de sus nidos dos veces al año para procrearse en un 'vuelo nupcial'.

La idea le surgió inicialmente a Fabián cuando en una noche de abril del 2008 departía con varios compañeros de su carrera en un café donde hablaban sobre un trabajo de la universidad.
"Para una materia debíamos presentar una idea de empresa novedosa. Cuando un amigo pidió papas fritas y crispetas para combinar con la cerveza se me vino a la mente la idea de vender hormigas culonas en empaques confiables que garantizaran la calidad y limpieza del producto", dijo el estudiante.

Tras consultar con varios tecnólogos de alimentos Fabián vio en su idea una potencial empresa de comida exótica y se unió con su amigo Fredy Toscano, un veterinario 'gomoso' con las hormigas culonas.

Después de varios análisis la pareja decidió usar el polietileno para fabricar las bolsas donde se guardan a las hormigas tostadas. El plástico es elaborado del mismo material con el que se cubren a las chocolatinas y chocolates de marcas reconocidas y que no permite la entrada de ácaros, bacterias y humedad.

"Las hormigas siempre se han vendido de manera artesanal en bolsas de plástico común y recipientes de pasta donde se endurecen y adquieren mal sabor. Hace 25 años nadie pensaba en vender agua embotellada de calidad y miren hoy el negocio en que se convirtió", precisó Freddy, el otro socio de la empresa que llamaron 'Manjar Santandereano'.

Cajas y sabores

Pero para darle otros toques diferentes a su producto los nuevos empresarios hicieron cajitas en propacolte laminado en su parte exterior, pues en el interior no lleva ningún químico para no alterar el sabor natural de las hormigas.

Para que el producto se vea más auténtico y regional la caja lleva el dibujo de una hormiga culona cubierto con el tradicional vestido de las campesinas santandereanas, con sombrero y cotizas. Las cajas vienen en presentaciones de 20, 125 y 500 gramos.

Para aplicarle los sabores de limón y BBQ los socios se asesoraron de la ingeniera química Sonia Lucía Rueda que les recomendó los saborizantes naturales que en polvo produce una reconocida empresa antioqueña.

"Los saborizantes son ciento por ciento naturales y no tienen químicos. Se adaptaron muy bien a la contextura de la hormiga y en verdad el sabor es muy agradable", precisó la profesional egresada de la Universidad Industrial de Santander (UIS).
Buscan permiso para exportar.

Ibeth Juliana Niño, sub directora de Turismo del Instituto Municipal de Cultura de Bucaramanga, indicó que el trabajo de 'Manjar Santandereano' se está mostrando en encuentros oficiales, foros y ferias para que visitantes conozcan a las hormigas en sus nuevas presentaciones.
La Rueda de Negocios que se realizará en el 2010 en Bucaramanga será el próximo evento en el que el insecto empacado, que también se vende en su sabor natural, será una de las atracciones.
Por ahora, Fabián y Freddy trabajan en nuevos sabores de queso y chocolate y apartaron para el próximo año, con campesinos de Charalá, San Gil y Valle de San José (Santander), 1.000 libras de las hormigas que necesitan para cumplir con los pedidos que ya tienen de Cali, Medellín, Bogotá y la capital santandereana.

"Ya comenzamos a tramitar con el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) el registro sanitario para exportar el producto a países como España de donde ya nos han hecho pedidos", dijeron los socios.

Historia y preparación

Las hormigas culonas fueron conocidas por los soldados españoles que en la época de la Conquista descubrieron que los indígenas guanes, en Santander, las tostaban con el calor de las piedras en las fogatas y eran ofrecidas a las mujeres en una especie de ceremonia nupcial.
Tras ser capturadas, las hormigas son tostadas en vasijas de barro, saladas y empacadas para venderlas en paquetes que van de los 2.000 a los 100.000 pesos. A la hormiga se la retiran lo picos, patas y alas, pero algunas personas prefieren tan solo comerse su prominente abdomen.
Muchas personas han llevado las hormigas a los Estados Unidos, México y Alemania, donde son consideradas un verdadero manjar. De su explotación comercial viven en Santander unas 3.000 familias.

Investigaciones sobre el insecto realizadas en la Universidad Industrial de Santander muestran que tiene altos niveles de proteínas y muy bajos niveles de grasas saturadas.

miércoles, 15 de julio de 2009

«As abellas non son moscas»


Quince pequeños aprendices de apicultor de Coirós descubren en un taller en Abegondo cómo viven esos insectos, cómo se hace la miel y de dónde viene la cera.

Huele a lavanda. A espliego. Haciendo equilibrio en las flores que tiñen las matas de azul, un grupo de abejas obreras recogen polen. «Tamén hai moito abellón», apunta un hombre que, azada en mano, prepara la tierra para poner nuevas plantas. «O abellón é máis salvaxe, as outras son practicamente domésticas.

Pero eles non fan nada», comenta. Porque las abejas no atacan. Se defienden. Lo hacen cuando están amenazadas. Esa es parte de una lección magistral que el responsable de la Casa das Abellas, en el municipio coruñés de Abegondo, Suso Asorey, ofreció ayer a un grupo de quince aprendices de apicultor. Tienen entre seis y diez años.

Llegaron desde Coirós para conocer cómo se hace la miel, descubrir qué es exactamente la cera y comprobar que ninguna abeja está dispuesta a morir por nada. Únicamente cuando ven amenazada su colmena. Porque ellas, cuando pican, pierden su aguijón y mueren.

El taller es una de las actividades de verano organizadas por el concello de Coirós. Durante la clase descubrieron que, como asegura Suso, «as abellas non son moscas». Porque no se van cuando las apartas con la mano. «Cando lles das para espantalas, séntense ameazadas e atacan», apunta.

Que las abejas no son moscas ni avispas lo corrobora el maestro. Este no duda en ponerse ante una de las colmenas. Va seguido de su tropa de apicultores. Cubiertos por sus pequeños trajes de tela blanca, tapados hasta la rodilla, son colocados como alfiles sobre una tabla de ajedrez. Para que todos puedan ver el arte de las abejas, el orden que marca la única reina que rige el panal. Lo que ven es puro espectáculo natural. El orden de la vida.

Las abejas revolotean en torno al maestro. «Estas son obreiras. están volvendo do campo, cargadas de polen», comenta. Luego se hace a un lado. La vía de entrada al panal está ahora libre. Entran en tropel. «¡Increíble!», grita uno de los alumnos, emocionado por la habilidad de esos pequeños insectos. En verano, en un día de sol con los campos llenos de flores, las obreras no paran de trabajar. «Cada viaxe para recoller polen é un labor que lles leva unha media hora», explica el maestro.

En el trajín ninguna abeja se confunde de hogar. «O olor é o que as guía. As abellas que están dentro recoñecen aunha intrusa polo olor», comenta. Pero cada enjambre puede generar otra nueva colmena. Es la regidora la que abandona la casa con un buen escuadrón de obreras que la ayudarán en la labor. Buscan un buen lugar para formar otro panal. En la vieja casa queda el resto, cuidando a una nueva reina.

Las abejas claman ayuda para luchar contra las enfermedades.


La más grave, segun COAG, el parásito varroa destructor, que provoca la mayor parte de las muertes. A la poca investigación se suma el elevado coste de los medicamentos que los apicultores deben pagar de sus bolsillos.

La organización agraria COAG ha pedido al Gobierno que mejore la deficiente coordinación sanitaria entre las administraciones en la lucha contra la varroosis, al tiempo que ha solcitado mayor celeridad en la convocatoria de los proyectos de investigación aplicada al sector.

Así lo ha manifestado al MARM, durante la reunión que han mantenido, en la que COAG ha destacado el fuerte incremento de la presión parasitaria de las explotaciones apícolas donde el varroa destructor causa la mayor parte de las muertes en las colmenas.

Según la OPA, los productores de miel y polen asumen los costes para paliar este problema que se elevan a 2 y 3 euros por colmena, mientras en países terceros, los medicamentos son más baratos.

Las soluciones pasan por, o "potenciar la fabricación por parte de los laboratorios españoles de los medicamentos veterinarios" o "importar productos de terceros países, de comprobada eficacia y con precios más razonables".

lunes, 6 de julio de 2009

Veneno de "Abejas" para la Artritis

Una empresa de Nueva Zelanda está buscando la aprobación de la Unión Europea (UE) para comercializar el veneno de abeja como tratamiento para aliviar el dolor ocasionado por la artritis.

La compañía Nelson Honey & Marketing asegura que dos cucharaditas diarias de su miel "aderezada" con veneno extraído de las abejas tiene poderes anti-inflamatorios sobre las articulaciones.

La idea de utilizar el veneno de las abejas no es nueva -alguna clínicas hasta ofrecen picaduras de abeja.

La Agencia de Normas Alimentarioas del Reino Unido aseguró que está considerando analizar la terapia en los próximos meses.

La miel de Manuka con veneno de abeja adicionado ha estado disponible en Nueva Zelanda por 13 años y sus creadores aseguran que, si bien contiene un veneno, ha demostrado ser extremadamente segura.

El producto contiene una mezcla de miel del árbol Manuka -nativo de Nueva Zelanda- y veneno seco de la abeja Apis mellifera utilizando máquinas eléctricas que envían impulsos para estimular la picadura de las abejas obreras a través de una película de látex en un recolector de vidrio.

Algunos beneficios

La etiqueda del Ease Nectar advierte a los consumidores que deben iniciar con un cuarto de cucharadita al día e incrementar la dosis hasta una o dos cucharaditas, según sea necesario.

También advierte de que las personas con alergias a la miel o al veneno de abeja deben obtener la aprobación de un médico antes de su uso, y que no debe administrarse a niños menores de 12 meses de edad.

La miel siempre ha sido aclamada por sus propiedades curativas, pero la Campaña de Investigación de la Artritis argumentó escepticismo sobre las propiedades benéficas del veneno de abeja en el tratamiento de la enfermedad.

Alan Silman, médico en jefe de la campaña, dijo: "Recientemente hemos elaborado un informe sobre la eficacia de las medicinas complementarias en el tratamiento de los tipos comunes de la artritis basada en la evidencia científica disponible y el veneno de abeja no figuraba, ya que no se han hecho investigaciones en este producto .

"Como resultado, es difícil postular la acción del veneno de abeja o la forma en que se supone que funciona, porque toda la evidencia disponible es totalmente anecdótica".

sábado, 13 de junio de 2009

Los Lepidopteros


Licénidos.
Los machos presentan colores más llamativos y brillantes que las hembras (azules, marrones, dorados…) y suelen ser de pequeño tamaño.Algunas orugas de esta familia colaboran con las hormigas (simbiosis) de tal modo que mientras las últimas las protegen de las abejas y avispas las primeras les proporcionan líquidos azucarados.La mariposa de los geráneos (cacyreus marshalli), la morena serrana (aricia cramera), la manto bicolor (lycaena phalaeas), la icaro polimatus, la niña celeste (polyommatus bellargus), etc., pertenecen a esta familia.


Ninfálidos.
De tamaño generalmente mediano, presentan hermosos colores anaranjados. Destacan en esta familia la pandora (argynnis pandora), el pavo real (inachis io), la sofia (issoria lathonia) y las vanessas (atalanta y cardui).

Papiliónidos.
Son muy hermosas, de gran tamaño y colores blancos o amarillos en los que destacan manchas rojas. Resultan curiosas las prolongaciones o colas que presentan algunos miembros de esta familia. Se integran en la misma la podalirio (iphiclides podalirius), la macaón (papilio machaon) y las parnassius (parnassius apollo y parnassius mnemosyne).

La vida en sociedad moldeó el cerebro y la conducta de insectos


Los investigadores encabezados por Sean O'Donnell, profesor de psicología en la Universidad de Washington, encontraron que una región importante en el cerebro de una avispa primitivamente social se desarrolla mejor en las hembras dominantes que en las subordinadas.

Este hallazgo, el primero de su tipo, contrasta con la mayoría de trabajos anteriores sobre el desarrollo del cerebro de los insectos sociales. Esos estudios se hicieron sobre especies muy sociales con tamaños grandes de colonia.
Entre estas especies, la edad desempeña un papel importante en la ejecución de tareas, y las obreras que dejan el nido para forrajear generalmente han desarrollado mejor sus cerebros.
Los investigadores encontraron un patrón opuesto en una avispa primitivamente social. Aquí, las hembras dominantes (que se quedan en casa) tenían un desarrollo mayor del cerebro. En esta especie, las interacciones de dominancia directa entre las hembras determinan la ejecución de tareas. Para explicar el desarrollo del cerebro, eran más importantes la dominancia y las interacciones sociales que las tareas de forrajeo.
En este nuevo estudio, O'Donnell y sus colegas de la Universidad de Texas analizaron el desarrollo del cerebro de la avispa primitivamente social Mischocyttarus mastigophorus del bosque tropical nuboso cerca de Monteverde, Costa Rica. Estas avispas viven en colonias cuya población varía desde varios individuos hasta varias docenas, y donde la división de labores es gobernada por la agresión.
Los investigadores examinaron ciertas áreas del cerebro de los insectos. Los datos mostraron que esas áreas eran más grandes entre las reinas y las hembras que permanecían dentro del avispero. Esto es lo opuesto a lo que varios investigadores han encontrado entre las especies muy sociales con grandes tamaños de colonia. En tales especies muy sociales, generalmente las obreras que dejan el nido para forrajear tienen cerebros mejor desarrollados.
Parece claro que las colonias primitivamente sociables eran la situación ancestral, y que las colonias muy sociales se desarrollaron y evolucionaron a partir de ellas.Esta investigación sugiere que el comportamiento de ejecución de tareas y el desarrollo del cerebro han cambiado de una manera fundamental en los insectos sociales que forman colonias complejas y grandes, con respecto a los insectos primitivamente sociales.
Este trabajo cobra gran importancia porque los insectos sociales son un modelo muy útil para entender el diseño de los cerebros y la relación que existe entre el diseño cerebral y la complejidad social. Y tiene implicaciones para la sociedad humana porque la evolución de nuestra propia sociedad puede afectar al desarrollo del cerebro. La conducta social impone fuertes demandas sobre el cerebro humano.
Los coautores del estudio son Theresa Jones, profesora de psicología, y Nicole Donlan, técnica de investigación, ambas de la Universidad de Texas.

Una Oportuna Ayuda


FESTINIÑO

Hacía calor aquella tarde en todo el monte. El sol apretaba con sus rayos, y la tierra estaba reseca, en especial el hormiguero donde, junto a su familia de más de un millón de hermanas, vivía mandíbula, una hormiga muy trabajadora y eficiente.

Mandíbula sentía sed por ese sol abrasador, así que decidió dejar a sus compañeras en la galería subterránea y subir hasta la salida del hormiguero. Allí, se sumó a una hilera de hormiguitas que marchaba hacia un matorral, bordeando el arroyo.

Cuando pasaron cerca del agua, mandíbula se trepó a una piedra y abrió su boca sedienta...
Pero pisó con tan mala suerte, que resbaló y cayó en medio de la agitada corriente.
Desde lo alto, una paloma que vivía en un árbol alcanzó a verla patalear desesperada.
Sin pensarlo dos veces, bajó en vuelo rasante, levantó una ramita, y la dejó caer por donde pasaba mandíbula.

Empapada y temblorosa, la hormiguira se aferró a la rama salvadora, y así, aunque muy asustada, pudo volver a la orilla.

-¿Cómo pudo pasarme esto?- dijo la hormiga. -¡Esa paloma que fue ángel guardián!
Todavía no había terminado de escurrirse y de acomodar sus antenas, cuando escuchó unas pisadas que supuso eran de un hombre.

Si, se trataba de un cazador que, sigilosamente, se acercaba apuntándole con su escopeta a la reciente salvadora.
La hormiga mandíbula era testigo de todo. Rápidamente se compuso, respiró hondo y, justo cuando el cazador afinaba su puntería, se acercó lo más rápido que le permitieron sus patitas y le aplicó un mordiscón tan fuerte y hormigoso, que el hombre abrió la boca como un cocodrilo y gritó ¡ayyyyyy!, tirando la escopeta contra las piedras.
La paloma, ignorante de todo esto, siguió en su rama acomodando sus plumas, y ni se enteró de la ayuda oportuna de mandíbula.
Estaba tan contenta por haber podido ayudar a la hormiga a salvar su vida, que sentía un maravilloso bienestar, el bienestar que sólo se experimenta cuando uno ha hecho una buena acción sin esperar recompensa.
Pero la hormiga igual no necesitaba reconocimiento alguno, le bastaba con saber que había podido defender a su salvadora. Jamás olvidaría que, gracias a la generosa y desinteresada palomita, ahora estaba sanita y feliz, volviendo a su hormiguero donde la esperaba su enorme familia, a quienes aliviada, relataría su aventura.
Moraleja: “Siempre reconocerás con una ayuda valiosa a quien te dio, tiempo atrás, una mano generosa”.